¿Te pasó alguna vez que pintaste una pared y quedaron vetas, marcas de rodillo o zonas con diferente brillo? Este problema es más común de lo que parece, y en la mayoría de los casos se debe a una combinación de factores como la mala aplicación o una pintura con bajo poder cubritivo.
Principales síntomas de una mala cobertura
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Color desparejo
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Marcas visibles del rodillo
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Diferencias de brillo entre zonas
Diagnóstico: ¿Por qué ocurre esto?
Las principales causas de estos defectos en el acabado suelen ser:
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Excesiva dilución de la pintura: cuando se agrega más agua de la recomendada, la película queda demasiado fina y no cubre correctamente.
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Pigmentos no cubrientes: algunas pinturas económicas usan cargas como carbonatos, que no cubren bien en húmedo. Al secar, pueden dejar zonas desparejas si no se aplican correctamente.
¿Qué influye en el poder cubritivo de una pintura?
El poder cubritivo está directamente relacionado con la formulación. Las pinturas con mayor contenido de dióxido de titanio —el pigmento blanco por excelencia— ofrecen una cobertura más eficiente. En cambio, aquellas con más carbonatos necesitan estar completamente secas para mostrar su poder cubritivo.
Además, los látex se formulan para ser usados tal como vienen, sin necesidad de diluir. Agregar más del 5% de agua puede arruinar la aplicación.
Técnicas de aplicación para evitar marcas de rodillo
Para lograr un acabado perfecto, te recomendamos seguir estas técnicas:
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Prepará bien la superficie: asegurate de sellar correctamente y que esté limpia y seca.
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Cuidá las condiciones ambientales: evitá pintar con corrientes de aire o en ambientes muy secos, que aceleran el secado.
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Elegí el rodillo correcto:
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Rodillo de pelo mediano para aplicar y distribuir bien la pintura.
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Rodillo de pelo corto apenas humedecido para repasar y planchar la superficie.
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Aplicá la pintura en forma pareja:
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Cargá bien el rodillo.
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Aplicá de manera uniforme en forma vertical (de arriba hacia abajo).
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No presiones demasiado el rodillo en el repaso final.
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Conclusión
Evitar las marcas de rodillo y lograr un color uniforme no depende solo de la calidad de la pintura, sino también de cómo la aplicás. Usá las herramientas adecuadas, respetá las recomendaciones del fabricante y aplicá las técnicas correctas para un acabado profesional.